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Alrededor de 300 estudiantes de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) acompañados por profesores y directivos de la institución asistieron a la vigilia de honor que se realizó frente al hotel Saratoga. 

La convocatoria, lanzada por la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), recibió la respuesta inmediata de nuestra casa de altos estudios. Cuarenta y seis flores acompañaron a la delegación. Una para cada cubano que perdió la vida en aquel fatídico accidente. Al frente del grupo universitario, el Dr.C. Raydel Montesino Perurena. 

El Parque de la Fraternidad, donde tuvo lugar la vigilia, fue una concentración masiva de cubanos. Una demostración, precisamente de fraternidad, con las familias de las víctimas. Pese a la gran cantidad de personas, hubo mucho silencio, como acuerdo tácito entre todos. La melodía de unos tristes violines, teñía el ambiente. 

La UCI desfiló frente al Saratoga con sus flores. Una a una fueron depositadas frente a las fotografías y nombres. Toda Cuba también dejó sus lágrimas. “Siempre con nosotros”, fue la frase que marcó la jornada. 

El presidente de la República, Miguel Díaz- Canel Bermúdez, llegó en la noche junto a otros miembros de la dirección del país para ofrecer sus condolencias. Más tarde, se escuchó el audio grabado del jefe del Comando 1 de Bomberos, quién, el día del siniestro, había pedido con urgencia el equipo de rescate. Luego, imágenes de los rescatistas, héroes que, por aquellos días, se empeñaron en encontrar a cada desaparecido. Desde el Morro, salvas de cañón.

Cubanos que asistieron al parque o que desde sus casas guardaron un minuto de silencio. Cuba marchó unida y dolida a la vigilia, con el brazo en el hombro de cada uno que perdió a alguien querido en el desastre. Marchamos, con flores, con lágrimas, con velas, con luz, para que ninguno de nuestros hermanos perdidos, se apague.