Tania Varona Alfonso, estudiante de la Facultad 3, no solo conquistó el premio de oro en la manifestación de música, sino que mereció también el premio especial Identidad.
La contribución que perdura en nuestros artistas
Tania Varona Alfonso, estudiante de la Facultad 3, no solo conquistó el premio de oro en la manifestación de música, sino que mereció también el premio especial Identidad.
Una página de estudio y producción está por cerrarse en esta casa grande de la Informática. Sin embargo, hay cuartillas de esa página que no desean borrarse. No pueden desprenderse, como tampoco, la consagración de los muchachos.
De la consagración continua que siempre es gratificada de disímiles modos y tiempos, de esa responsabilidad con el arte, la informática y la Universidad, se expresan algunos estudiantes que resultaron premiados en el Festival Provincial de Artistas Aficionados 2014. En la actual vorágine de pruebas, defensas y convites, pudieron balancear sus corre-corre para compartir con nosotros.
“Estos premios me llegan en un momento de mucho estudio para afrontar los exámenes finales pero igual nos sorprendió la noticia”, comenta Orson Omar Duque, estudiante de la Facultad 5, premio especial Identidad en Artes Plásticas con su performance “Mi moneda” y medalla de oro con su instalación “Herencia” en coautoría con Ricardo Valle.
“Digo "nos" -aclara Orson- pues detrás de cada uno de los performance, premiados o no, hay varias personas implicadas, sin las cuales no hubiera sido posible o al menos no los hubiera disfrutado.”
Para este artista aficionado de la Facultad 5 el premio representa entre otras cosas el reconocimiento a un grupo de estudiantes “que nos unimos en un momento determinado con varias ideas y además la oportunidad de contribuir al desarrollo del Movimiento de Artistas Aficionados de la UCI”, sobre todo en mi Facultad 5”, especifica.
Según revela Duque, graduarse y disfrutar lo que le queda en la Universidad es su expectativa futura básica. Pero como aficionado, más que pensar en el Festival Nacional, la aspiración de Orson es “seguir junto a mis amigos haciendo realidad las ideas que se nos ocurran sobre todo trabajando el arte conceptual.”
Para Jeiser Medrano y Yadiel Cepero Madruga, de la Facultad 4 el hecho de participar constituye un honor y reconforta. Ambos estudiantes merecieron la medalla de oro por su artesanía “S/T”.
A Yadiel lo que más le reconforta es haber participado junto a los miembros del proyecto sociocultural Amor a Segunda Vista en el proceso creativo de 14 obras, de las cuales seis fueron presentadas en el Festival Provincial y dos alcanzaron premios. Cepero, quien cuenta que sus obras invitan a reflexionar desde el arte sobre la violencia a que están sometidas las mujeres y reconocer los derechos de estas, valora como “un reconocimiento no solo a los autores de las obras sino a todo el trabajo que ha venido realizado el proyecto”. Estamos muy felices por los resultados obtenidos en el Festival Provincial, expresó. Su asociado a las artes, comparte esa felicidad “pues obtener varios premios de oro en mi primer provincial, no lo esperaba. Siempre es una gran responsabilidad representar a la Universidad y constituye un compromiso aún mayor, el de tratar de hacerlo mejor en próximas ediciones para mantener en alto el nombre de la UCI.”
Pedro Luis López Arias, premio de oro por el audiovisual “Psicoanálisis” en representación de la Facultad 6, siente su participación como un logro no solo para él, sino para todos los que lo han apoyado en cumplir este sueño.
“Recién me acabo de graduar de Ingeniero en Ciencias Informáticas, y creo que no hay mejor despedida que el premio por el trabajo desempeñado. El futuro es una cajita de sorpresas, ya veremos lo que trae, pero no pienso desvincularme del arte, eso nunca.”
Laureada por su perseverancia de cuatro años dedicados al arte y a la superación, según ella nos narra, Tania Varona Alfonso, estudiante de la Facultad 3, no solo conquistó el premio de oro en la manifestación de música con la interpretación de la obra "El yerberito", sino que mereció el premio especial Identidad:
“Mi mayor problema siempre fue escoger el número, pero cuando lo recibí no me lo creí. Luego me he dicho -relata- "esto es lo que estaba buscando". Al ser este mi último año también significa un nuevo ciclo en mi vida, añade, pues mi mayor temor era no poder llegar a la cima en ambas tareas: ser una buena informática y lograr cosas con la música. Este curso demostré que solo necesitaba creer que podía hacerlo, lo demás solo pasó.
“Quiero seguir mejorando y llegar lejos porque la música me apasiona, pero la informática es mi vida.”