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Redes sociales académicas: un espacio para la difusión de nuestra ciencia

Nuris Rodríguez Vázquez |
17 de Noviembre de 2020 / 9:00 am

Hoy el mundo no se concibe sin internet. La red de redes logra llegar a los más recónditos lugares del planeta, permitiendo mayor acceso a la información.

Las redes sociales se imponen en su gran variedad. Captan la atención de internautas. Dentro de ellas están las redes sociales académicas, recursos indispensables para divulgar el desarrollo científico de universidades, centros y proyectos innovadores. Researchgate, Mendeley, Academia.edu y otras, son exponentes de espacios que sirven al intercambio de saberes en todo el mundo.

La Dirección de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI), se place en poner a disposición de su comunidad universitaria una serie de trabajos periodísticos para ampliar los conocimientos sobre este tema de relevancia.

Las redes sociales académicas parten de la utilidad que brinda la Web 2.0 como herramienta de comunicación y colaboración que permite evolucionar las comunidades científicas que trabajan en un mismo tema e intercambian información. En estos espacios los científicos de diferentes áreas se reúnen para compartir sus avances y descubrimientos a través de publicaciones y opiniones que se hacen visibles.

En este sentido se pudiera hablar de Ciencia 2.0 que propone la aplicación de la web social a la investigación, al proceso científico. Entonces se comparten saberes, experiencias, proyectos, desarrollo académico, ciencia.

Constituidas como espacios abiertos que aún se encuentran en construcción y evolución continua, en estas redes sociales confluyen investigadores identificados con las mismas necesidades y problemáticas. Aunque también permiten la entrada de aquellos que tienen una visión diferente a una temática específica.

Entre sus componentes fundamentales está la gestión documental con consultas a bases de datos, búsqueda semántica y gestor personal. También está el componente del perfil académico que permite socializar publicaciones personales y datos sobre proyectos de investigación. Además, se encuentran los grupos que posibilitan establecer vínculos con grupos ya creados o crearlos.

Pudiéramos afirmar que las redes sociales académicas ayudan a compartir la investigación y sus recursos útiles como son las referencias bibliográficas: documentos, enlaces, informes y objetos de aprendizaje. Facilitan la gestión del financiamiento de proyectos de investigación y aportan herramientas de medición para la ciencia y la innovación. Urge a los investigadores unirse a plataformas como estas para fortalecer en la difusión de sus estudios y proyectos. Ganar en visibilidad ante la comunidad científica internacional y que se reconozca la labor realizada por los científicos cubanos, esta es una premisa indispensable para el desarrollo nuestra sociedad revolucionaria y socialista.

 

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