UCI

NoticiasTodas las noticias

La Huelga general de 1933 y la huida de Machado

Por: Ms.C. Luis Arias Verdecia y Dr.C. Pedro Luis Basulto Ramírez |
12 de Agosto de 2021 / 8:15 am
Huelga general de 1933

Se cumplen hoy 88 años de aquel 12 de agosto de 1933 cuando una Huelga General Obrera provocó el derrocamiento del régimen del dictador Gerardo Machado, para hacer valedera esa sentencia de José Martí que señala: “Donde los trabajadores son fuertes, lucharán y vencerán los trabajadores”.

El General Gerardo Machado había llegado al poder en mayo de 1925 y en sus primeras declaraciones manifestó, que ninguna huelga duraría más de 72 horas. Sin embargo, ese mismo año se creó la Confederación Nacional Obrera de Cuba, que en 1930 convocó a los trabajadores a una Huelga General que hizo tambalear el régimen.

Los efectos de la profunda crisis económica mundial de 1929 y la política sustentada en el terror que gozaba del apoyo de la banca estadunidense y nativa, pusieron al régimen machadista al borde.

A finales de julio de 1933 el movimiento obrero logró convertir un paro local de pequeños propietarios de ómnibus urbanos en la capital, en una huelga que se propagó a otros sectores laborales en todo el país. 

Las luchas llegaron a su punto culminante el 5 de agosto en una huelga general, el día 7 los esbirros de Machado ametrallaban al pueblo en las calles de La Habana, y con esto creció la indignación y la determinación de derribar al tirano.

Organizada y dirigida por la Confederación Nacional Obrera se llevó a cabo la huelga, y ese mismo día se decretó la huida del tirano Machado hacia el exterior, terminaba así su nefasto mandato.

El Artífice de la huelga general revolucionaria fue el prestigioso revolucionario Rubén Martínez Villena, quien había puesto al servicio del proletariado cubano toda su abnegación, talento y lucidez para consolidar las organizaciones obreras en sucesivas etapas de grandes convulsiones políticas y sociales en el país. Aunque no fue una victoria definitiva del proletariado cubano, al menos provocó una apertura democrática, que incluía la libre actividad sindical.

La fecha marcó un momento culminante en la lucha del pueblo cubano, pues aunque no fructificaron las ansias de libertad y soberanía nacionales, sí corroboró cuán necesaria era la unidad para alcanzar la definitiva independencia. La clase obrera obtuvo una victoria, que serviría de ejemplo a las generaciones futuras y confirmaba lo dicho por José Martí: “Donde los trabajadores son fuertes, lucharán y vencerán los trabajadores”. Nadie duda cuánta razón tenía el Héroe Nacional Cubano.